jueves, 6 de noviembre de 2008

Cuando te sientas agotado y sin fuerzas, no permitas que la debilidad se apodere de ti, debes ser fuerte y luchar por tus sueños, nunca debes abandonar un sueño, por difícil o lejano que lo veas, debes hacer todo por alcanzarlo.
Si ese sueño no resulta en el momento que esperabas, no desesperes y no mates ese sueño, sigue con más fuerza, no pierdas la fe en ti y de lo capaz que eres.
Si te sientes cansado, descansa, toma tu tiempo, para reponer tus fuerzas, para buscar un nuevo camino, para ver que esta mal y que te ha faltado por hacer.
y no olvides que uno de los puntos importantes es la "Paciencia", si la pierdes tu sueño morirá y tú nunca podrás saber si eras capaz de conquistarlo.
No importa que tan lejos este, ni si tu corazón esta triste, sólo sigue, no te dejes capturar por los momentos de debilidad y de tristeza.
Los sueños no son fáciles, debemos trabajar cada día por ellos y mantener una mentalidad positiva.
Hay sueños que no dependen sólo de nosotros, en esos momentos debemos ser pacientes y no perder la calma y en este caso no debemos castigarnos por no obtener esos sueños, cuando esperamos, por que no depende sólo de nosotros. Sólo nos queda ser positivos y pacientes, pese a la desesperación.
Cuando se nos viene lo negativo a la mente, es cuando bloqueamos el progreso y a veces el tiempo de espera se hace más largo..
Cuando no se lucha, nuestro corazón no tiene paz ni calma y la tristeza es más grande y a la hora de la muerte moriremos infelices, por haber sido incapaz de luchar o de al menos haberlo intentado y de haber vivido.
Luchar es el mejor regalo que podemos hacernos, para nosotros mismos y para la vida.
Si no luchamos o no tenemos sueños,
Que sentido tendría la vida?.

Cuando te digan que no

Una joven había tomado clases de ballet durante toda su infancia, y había llegado el momento en que se sentía lista para entregarse a la disciplina que la ayudaría a convertir su afición en profesión.
Deseaba llegar a ser la primera bailarina y quería comprobar si poseía las dotes necesarias, de manera que cuando llegó a su ciudad una gran compañía de ballet, fue a los camerinos luego de una función, y habló con el
director.
Quisiera llegar a ser una gran bailarina, le dijo, pero no se si tengo el talento necesario o que me hace falta.
Dame una demostración, le dijo el maestro.
Transcurrido apenas 5 minutos, la interrumpió, moviendo la cabeza en señal de desaprobación.
No, no tiene usted condiciones.
La joven llegó a su casa con el corazón desgarrado, arrojó las zapatillas de baile en un armario y no volvió a calzarlas nunca más, se casó, tuvo hijos y cuando se hicieron un poco mayores, tomó un empleo de cajera en un supermercado.
Años después asistió a una función de ballet, y a la salida se topó con el viejo director que ya era octogenario, ella le recordó la charla que habían tenido años antes, le mostró fotografías de sus hijos y le comentó de su trabajo en el supermercado, luego agregó: Hay algo que nunca he terminado de entender.

Cómo pudo usted saber tan rápido que yo no tenía condiciones de bailarina?

Ahhh, apenas la miré cuando Ud. bailó delante de mi, le dije lo que siempre le digo a todas, le contestó.

Pero eso es imperdonable! Exclamó ella, arruinó mi vida, pude haber llegado
a ser primera bailarina!

- No lo creo, repuso el viejo maestro. Si hubieras tenido las dotes necesarias, y una verdadera vocación para bailar, no habrías prestado ninguna atención a lo que yo dije.

Sin duda, si te crees perdido, estás perdido y si crees que no puedes, pues no podrás.

Si quieres hacer algo pero lo crees imposible, no creo que triunfes jamás.

En la vida no solo el valiente o el veloz triunfa, tarde o temprano el que siempre vence es el que cree que es posible